El director general de Carreteras, Jorge Urrecho, acompañado por el delegado del Gobierno en Cantabria, Samuel Ruiz, ha visitado hoy las obras que está llevando a cabo el Ministerio de Fomento para la reparación y rehabilitación del puente metálico de la N-634 sobre la ría del Asón, que une las localidades Treto y Colindres.
Este puente es un elemento singular en las carreteras cántabras y fue inaugurado en 1905. Está formado por dos arcos en celosía metálica roblonada. Debido a su antigüedad y al ambiente atmosférico agresivo en el que se encuentra situado, presentaba un estado de deterioro que hacía imprescindible su reparación. Las obras de rehabilitación se iniciaron el 16 de septiembre de 2015 y han culminado recientemente. En ellas el Ministerio de Fomento ha invertido 3,18 millones de euros.
Durante la ejecución de las obras ha sido preciso el corte total del tráfico rodado, quedando habilitado en todo momento, salvo un periodo de dos semanas en junio pasado, el tráfico peatonal. La apertura al tráfico se produjo el pasado 24 de junio, con lo que se logró no producir afecciones al tránsito en ninguno de los dos veranos, circunstancia de gran importancia al estar enclavado el puente en una zona de gran atractivo turístico, por lo que existe un importante tráfico estacional.
Importante para la utilidad y el uso del puente ha sido la ampliación de la anchura de las nuevas aceras construidas, que ha pasado de 1,00 metros que tenían las antiguas a 1,90 metros de las actuales, lo que hace compatible el tránsito peatonal como el ciclista, ambos de gran intensidad, sin interferirse entre ambos como ocurría antes de las obras.
Las obras han consistido en: